En la actualidad la nube de datos cuenta con múltiples utilidades que son usadas a diario tanto por empresas como por particulares. Es una manera de almacenar datos que ha mejorado la accesibilidad a la información, a la vez que ha colaborado en los procesos de digitalización en muchos ámbitos. En nuestro presente es una herramienta fundamental que cada vez cobra más fuerza.
Y es que, aunque no lo creas, estás usando la nube mucho más de lo que piensas. Mientras trabajamos con aplicaciones de ofimática o mientras escuchamos música, estamos usando la nube como manera de almacenamiento virtual a la que accedemos desde cualquier dispositivo. También puede realizar funciones más complejas como alojar servidores que sirven para configurar redes de información.
Pero no está todo inventado. La nube cuenta con un futuro bastante prometedor que pretende aprovechar aún más sus posibilidades. Aunque no lo parezca, la nube sí que cuenta con ciertas limitaciones que restringen su funcionamiento. Por ejemplo, las nubes en la actualidad se pueden considerar como herramientas regionales. Es decir, existen multitud de nubes con diferentes usos pero que no están interconectadas.
Es decir, se pueden establecer fronteras virtuales entre las diversas nubes también debido a cada una usa su propio “lenguaje”. Existen accesos distintos y sistema de almacenaje que pueden diferir de una nube a otra.
Otros de los retos para el futuro de la nube es ir más allá de su función de almacenamiento. Su tratamiento de los datos es limitado, es decir, no puede establecer relación en la información que almacena ya que su capacidad analítica es muy reducida o inexistente. Se necesitan aplicaciones o programas externos para realizar esta función.
Las principales características de la nube del futuro
Los expertos creen que el futuro de la nube pasará por salvar todos esos escollos en beneficio de los usuarios. Una de las posibles soluciones es el establecimiento de lo que se conoce como Multicloud que permite usar distintos servicios de nube de manera coordinada.
Otra de las previsiones de los expertos para el futuro de la nube es el Global Data que consiste en una estructura que permita acceder a todas las nubes sin limitaciones regionales de ningún tipo. Los datos se podrán mover con facilidad de una nube a otra sin que exista restricción alguna.
La Inteligencia artificial también formará parte de la nube. Proyectos como el desarrollado por IBM, llamado Watson, permite el tratamiento de datos no estructurados. Esto puede ser una verdadera revolución ya que nos permitirá gestionar la información almacenada en atención a su contenido.
La nube será el escenario donde se produzca lo que se conoce como machine learning donde las aplicaciones aprenderán, por sí mismas, las funciones que tienen que realizar y el modo de ejecución óptimo. También será el escenario donde se creen redes neuronales artificiales que permitan la resolución de problemas complejos con toda la información que se contiene en la nube.
Todo esto es lo que nos espera en el futuro de la nube que será bastante inmediato. Sobre todo, contará con grandes aplicaciones en el mundo empresarial y en el ámbito científico donde la labor analítica es fundamental.
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